En esta entrada quiero hablarte de cómo encontrar la paz interior.
Si estás por aquí, quizás es porque últimamente empiezas a no encontrar mucho sentido a todo lo que hacemos.
Es normal, yo también me sentía así (y cuando me pierdo un poco también sigo sintiéndolo).

Si necesitamos encontrar la paz interior es porque buscamos algo más espiritual que simplemente cumplir objetivos y demás historias que nos cuentan.
La semana pasada estuve con un antiguo compañero de trabajo y me dijo “¿oye David, qué haces para estar siempre sonriendo?”.
Yo le comenté que para nada estoy todo el rato así.
Más bien, estoy así cuando disfruto de la vida que estoy sintiendo en ese momento y con la persona que estoy, pero que otras veces me exaspero como todos los demás.
No sé si eso es paz interior o qué es lo que es.
De hecho, no sé si podemos conseguirla al 100% el ser humano por todas las creencias e ideas irracionales que pasan a cada momento por nuestra cabeza.
La realidad es que quiero darte un poco de luz de este tema y, espero que te sirva todo lo que tengo que decirte ahora.
¡Vamos al turrón!
Cómo buscar la paz interior
Antes de nada vamos a definir un poco qué es esto de la paz interior y cómo conseguirla en tu día a día.
Supongo que estarás conmigo si la defino como algo subjetivo (o sea de cada uno) en el que te embarga un sentimiento de bienestar que experimentas en tu cuerpo tranquilidad y relajación tanto física como psicológicamente.
Vamos que te sientes como si estuvieras en el Nirvana de los budistas, je, je, je.
Además, podemos interpretarlo como la meta a la que toda persona quiere llegar dentro de los estandartes de espiritualidad y felicidad.
Para las personas que han hallado la paz interior es bastante improbable que le influyan las cosas que suceden alrededor.
Podemos conseguir el éxito profesional, la mejor pareja del mundo, una familia de película o la mejor casa de tu zona que, nunca estamos realizados.
¿No crees?
Además discutimos más a menudo con los seres queridos que nos rodean aunque no queramos.
No sé, es como si estuvieras frustrado con el mundo, pero la realidad es que no sabes de dónde fluye ese sentimiento.
Por eso, hay cientos de caminos para encontrar la paz interior, imagino que tantos como personas, pero estos que te muestro a continuación son los que cuenta la psicología y los que yo uso en particular.
El camino para encontrar la paz interior
Muchas veces (soy el primero que me incluyo) pienso que la gente no está conforme con la vida que tiene nunca.
Como si fuéramos insatisfechos crónicos hacia la vida.
Nunca es suficiente, siempre hay vergüenzas que tapar, emociones que no nos dejamos sentir o heridas que sanar.
¿Cómo vamos a encontrar la paz interior si siempre tenemos excusas para machacar nuestra mente con cosas que nos faltan?
Así es imposible.
Mientras que pensemos que siempre nos falta algo en vez de pensar que tenemos suficiente para ser perfectos, nunca encontraremos esta dichosa paz interior.
Si te sientes frustrado por tu trabajo, por falta de tiempo para tener más ocio o crees que no has conseguido suficientes logros en tu vida, no te será suficiente ni tu familia.

Lo siento, parece duro lo que te estoy diciendo, pero la realidad es esta.
¿Cómo sabes que hay algo llamado paz interior si no has tenido algo que se asemeje en tu vida?
¿De dónde crees que surge? ¿De tener más dinero, tiempo o recursos que están fuera de ti?
La paz interior es un proceso de aceptación de lo que tienes
Estarás conmigo de acuerdo que si no la has encontrado ya con más de 40 años en tu vida, o cambias el enfoque o no lo harás nunca.
¿No crees?

Es normal que pasemos por momentos de desgana, apatía por lo que hacemos e incluso que lleguemos a odiar todo lo que tenemos.
De hecho yo en el 2007 casi mando todo al traste y estuve a punto de hacer las maletas e irme a vivir a Noruega.
¿Sabes qué?
Que creo que no es necesario algo tan drástico en tu vida.
Desde mi perspectiva es necesario que te hagas un plan de vida, pero sin suicidarte hacia adelante.
Me refiero con este término a lanzarte en hacer proyectos en los que no tienes habilidades ni actitudes suficientes para poderlos ejecutar, o tener demasiadas expectativas de lo que vamos a conseguir.
Como te comenté antes, en el 2007 empecé a estudiar incluso noruego con una profesora particular.
Al cabo de meses de poco aprendizaje, de mucho dinero gastado y de más expectativas me dejó tirado de un día para otro.
¿Sabes cómo me sentí?
Sin dar muchas más explicaciones me dijo que tenía que estudiar un máster y que no podía dar más clases.
¿Sabes lo difícil que era encontrar otra profesora de noruego y eso que vivo en Madrid?
Sentí que mi vida se truncaba.
Que mis ilusiones y esperanzas de dejar el trabajo que no me gustaba nunca iba a conseguir dejarlo y menos conseguir encontrar la paz interior.
Este punto de mi vida es una tontería que te cuento años después de haberla pasado, pero en ese momento me sentí desolado.
Si te fijas en el ejemplo, estarás conmigo de acuerdo que el problema lo tenía yo y no las circunstancias. Es decir, que si no cambiaba mi forma de ver la vida, daba igual si vivía en España, Noruega o en Nepal.
Tus metas son tuyas así como el control de ellas
Como ves, el ejemplo que te he puesto de mi propia vida te muestro la mejor manera de buscar la paz interior.
¿Cómo?
Pues centrándote en lo que ya tienes.
Por cierto, te muestro fotos con algo de humor porque yo soy así, pero risas pocas cuando te sientes en estas circunstancias.
Con sensación de vacío tanto a nivel de expectativas y objetivos, sin rumbo fijo en tu vida y lo peor de todo con apatía por la vida en general
Es probable que si tú te sientes así que hayas pensado en dejar tu vida a merced de algún tipo de sustancia adictiva.
No lo hagas si quieres un consejo y sigue leyendo lo que te tengo que contar.
Este tipo de situaciones te muestran cuan vulnerables somos muchas veces si ponemos nuestras fuerzas en los demás y no en nosotros mismos.
Lo que intento transmitir con este ejemplo es que no puedes delegar tus ilusiones y aspiraciones en otros.
Tú debes hacerlas y solo tú puedes ser el partícipe de tus proezas. Así te darás cuenta de que nadie te puede dejar tirado.
Uno de los puntos más importantes que te va a llevar hacia la paz interior es que necesitas centrarte en ti y en lo que ya tienes.
Algunas veces, el camino lo cruzamos por los matorrales en vez de por el sendero
Seguía frustrándome cada vez más, mi trabajo lo odiaba cada día con todo mi ser y nada de lo que hacía tenía sentido para mí.
Cualquier persona podría pensar que perdí un año de vida de estudio.
Para mí fue un momento de recogimiento personal y de planificación en lo que quería en la vida.
A veces las cosas suceden porque tienen que suceder.
Si yo no hubiese perdido la oportunidad de seguir estudiando noruego, no me decantaría por seguir estudiando también en lo que amo que es la psicología.
Y no hubiese terminado el grado, curso de coaching y experto en psicología deportiva para tener una cualificación y no volver a empezar de qué sé yo en otro país.
Puedes pensar que me excuso en la decisión que tomé, que fui un cobarde por no intentarlo sin salir de casa.
Puede ser.
La paz te la da tomar buenas decisiones en tu vida
Lo que tengo claro es que si tomamos decisiones desde el miedo y la furia por lo que no tenemos, no son buenas decisiones.
Ese no era el camino para encontrar la paz interior.
Como un ave Fénix me hizo ganar fortalezas e ir a por lo que quería sin importarme la edad en la que lo terminaría.
¿Cuál es el truco de finalizar algo cuando la recompensa está tan lejos?
Es muy difícil en esta sociedad planificar algo a tan largo plazo como es a 6-7 años vista.
Mi truco fue tomarme como pequeñas batallas cada práctica, cada trabajo en grupo, cada examen y año terminado para cada día encontrar la paz interior a pequeños sorbitos.
Aquí va el segundo tip para encontrar esta paz que es el ver el camino como un desarrollo constante, pero un poco más cada día.
¿Has oído hablar de Kaizen?
Da pequeños sorbitos a la vida para no emborracharte de las cosas malas
Ese es mi lema que me digo como un mantra cada día.
Puede parecerte muy tonto, pero es así como intento vivir.
Todo el mundo siente dolor (unos más, otros menos) pero no dudes que todos lo hacemos.
El problema es que unos se centran más en las cosas cotidianas que hacemos mal y por eso surge la frustración y el desánimo.
El tercer tip que te puede ayudar para saber cómo encontrar la paz interior es este:
Estas vacaciones pasadas tenía una semana libre para ir con mi mujer de vacaciones.
Cualquiera habría pensado pues a derrochar cada minuto que tengas y aprovechar cada momento en hacer mil cosas y conocer mil sitios.
¿No crees que vivimos cada vez más estresados porque hacemos mil cosas a cada momento?
Miramos el móvil constantemente, tenemos que tener la televisión encendida si estamos haciendo otra cosa o estamos escuchando música y a la vez haciendo otra actividad.
¿Te has dado cuenta de que en los últimos 20 años se ha aumentado exponencialmente la velocidad con que hacemos las cosas?
Si no te lo crees, prueba a ver una peli de acción de los 90 y una actual y compara las secuencias. Te sorprenderá.
Lo bonito no es llegar, es el camino
Me alquilé una pequeña casa dentro de una finca privada en la que no había nadie más alrededor que los Picos de Europa por un lado, por el otro el río Sella y enfrente unos conejos que estaban comiendo todo el día.
Solos mi mujer, los conejos y yo, je, je, je.
Claro que iba a las playas pero estaba 1 hora máximo para no perder todo el día, bebía, comía y paseaba, corría por el paseo marítimo mejor que ningún día.
También meditaba que es otro de los tip que quiero contarte.

Este punto te ayuda a concretar y focalizar como un láser tus pensamientos y, al unirlo con el punto anterior (no hagas multitarea) te relaja muchísimo.
En definitiva, hacía lo que en ese momento me pasaba por la cabeza, pero eso sí, disfrutando cada momento con mi pareja y el placer que estaba sintiendo en ese momento como único.
Al terminar la tarde, más o menos desde las 20 h y hasta las 2 a.m lo utilizaba para cenar con mi pareja y con nuestros vecinos los conejos.
Veíamos las estrellas, conversábamos y tomábamos unos vasos de sidra para amenizar aún más ese momento y no necesitaba nada más.
Ni tele, ni música, ni nada parecido para pasar esas horas.
Si he hecho esta entrada es porque cuando estábamos corriendo por el paseo marítimo y, pasábamos por delante de hoteles de 4 estrellas veías a la gente tomando algo amargada de su existencia, con el móvil, aburrida y exasperadas por qué se yo.
Conclusiones para encontrar la paz interior
Quiero hacer un resumen de todos los puntos que te he mencionado ya:
- No puedes delegar tus ilusiones y aspiraciones en otros.
- Disfruta de cada momento con lo que haces y con quien lo haces.
- No por tener más vas a estar mejor. Siempre seguirás anhelando otras cosas así que ¿por qué no disfrutas con lo que tienes?
- Afiánzate en pequeños objetivos para conseguir algo más importante y ten el control tú en todo momento.
- No te centres en ser multitarea porque no se nos da bien
- No digo que no luches por algo complicado, ni mucho menos, solo que si un consejo puedo darte es que planifiques todo al dedillo lo que tú puedas hacer.
- Ten siempre fe en ti y busca apoyo en los que te quieren para encontrar la paz interior.
- Medita siempre que puedas, yo lo hago antes de dormir.
Siguiente paso
Te presento dos posibles caminos si crees que te puedo ayudar en tu proceso de cambio:
Si te has sentido identificado y crees que necesitas ayuda de alguien que haya pasado por dónde tú. Puedes contratar mis servicios de coaching o PSYCH-K
Por otro lado, si crees que tu problema es que no sabes qué hacer con tu vida laboral. Quiero presentarte mi curso Descubre tu superpoder.
Este curso ha ayudado a bastantes alumnos a que tengan la claridad necesaria para saber por dónde deben tirar y a que encuentren su propósito de vida–> Descubre tu superpoder y encuentra tu pasión.
También tienes la posibilidad de entrar en el grupo de Facebook para descubrir tu talento por si quieres quieres preguntarme algo más de algún bloqueo concreto.
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